Editorial 84

Un día del idioma, por allá en 2009, veíamos nacer al mundo digital la revista que tiene ante sus ojos.

Pocas, muy pocas publicaciones culturales, pueden decir que llegan a los diez años continuos de actividad sin desaparecer antes por cualquier cantidad de vicisitudes. En esta edición 84 llegamos con orgullo a nuestro décimo aniversario. No son pocas las razones que tenemos para sentirnos tan alegres y satisfechos por la labor cultural que, gracias también las personas que nos han apoyado, venimos realizando. Como pocos medios, tenemos las puertas abiertas a todas las manifestaciones culturales y artísticas. Basta que usted, señor lector, de una mirada para encontrar desde teatro hasta filosofía, desde crítica de cine hasta novela, eso sin olvidar el espacio que las artes plásticas tienen también en nuestra revista. A esto añádase que sin lugar a dudas otra de nuestras banderas ha sido apoyar los talentos nacionales y brindarles un espacio de proyección al mundo.

Sabemos, también, que la cultura no tiene fácil su subsistencia en sociedades que desprecian la inteligencia y la creatividad por mor de lo útil o lo «entretenido». Nuestra perseverancia y los frutos que hemos recogido nos siguen motivando a mantener este espacio en la red que con todo amor tenemos disponible para dar voz al ingenio de las letras y a la agudeza del pensamiento, a la par que habla bien de esa Colombia de la que pocos hablan.

Desde el comienzo, hemos creído que la, alguna vez, tradición nacional de dar voz a las artes y las letras a través de publicaciones seriadas, no debe perderse y debe, como lo pensábamos entonces, en 2009, y lo pensamos hoy, hablar con el lenguaje del siglo; el del nuestro es el de lo virtual y lo plural. De allí nuestro lema «ideas libres y diversas». Estos cronopios abiertos al mundo y a la vida acogen y acogerán todo lo bueno que pueda ser expresado por el talento humano.

No podemos dejar de agradecer a todos los escritores que han pasado por nuestro medio, en especial a quienes han perseverado con nosotros, a quienes han creído en nuestro proyecto y a quienes nos tienen como su principal opción a la hora de dedicar tiempo a la lectura. Gracias a ustedes, nuestros escritores y lectores, podemos decir ¡feliz, muy feliz y fructífero aniversario, Revista Cronopio!

Los editores.