Edición 39 – Revista Cronopio

Portada edicion 39 revista cronopio

Primera

LA PRIMERA LÍNEA

Por Alicia Partnoy*

A Jorge Mendoza Calderón, el Piura,
ciudadano peruano desaparecido en
La Plata en 1976

—…Porque escribir novelas es fácil, son como un cuento largo, sólo les hace falta principio, desarrollo y final. A mí lo que me gustaría de verdad es ser poeta, siempre soñé con saber escribir versos.

La carcajada con que ella recibió su comentario fue exagerada. Salvador, en cambio, apoyó los pies sobre la mesita ratona e instaló sobre su panza el vasito vacío del último bourbon de la noche. Ella optó por acallar los gritos de Manu Chao que repetía incansable: «mexicano, clandestino, marihuana, ilegal». Apuntó con el remoto la cassetera plateada y unas letras azules le guiñaron «good bye».

Leer…

Ethan

UNA CANCIÓN PARA ETHAN

Por María Angélica Pumarejo*

Los niños corrían a tirar piedras a su paso en un destartalado buick roadmaster 1953, y ese carro es el mejor de los pretextos para mirar unas buenas caderas. Aunque, en mi avaricia, pese a la perfección de la máquina, siempre lamenté que ese buick no fuera más alto, de tal manera que la inclinación de Alice sobre el motor hiciera más corta su falda y más largas sus piernas a mi vista, igual me las arreglaba para rozar sus calzoncitos de algodón mientras olía su rendija de primavera. Levanté mi mirada y descubrí la suya llena de lágrimas, ya empezaban a escurrirse por sus mejillas acompañadas de un grito delirante, cuando encontré el dedo meñique atrapado, la sangre roja como dulce de frutillas le corría entre los dedos hasta hacer un charquito en el cuenco de la mano completamente torcida e inmóvil. El martillo estaba viejo y oxidado para la labor pretendida, pero mucho me ayudó a desbaratar a golpes todas las piezas ensanchadas del ventilador hasta liberar la mano de mi Alice. La cargué sobre mi hombro abrazada a mi joroba, no paraba de llorar con un quejido hondo y aflautado, de esos propios para reclamarle a la vida la más infinita desgracia.

Leer…

Pobres

GRACIAS A LOS POBRES

Por Antonio Vélez Montoya*

«Sea cual sea tu causa, a menos que se limite
la población, es una causa perdida.»
(Wildlife Conservation Society)

Es posible que ya la población mundial haya sobrepasado la capacidad de soporte del planeta, y el daño al sistema ecológico global sea irreversible. Por eso, si los seres humanos deseamos permanecer varios siglos más sobre la tierra, es necesario tomar rápidamente la decisión de frenar el crecimiento demográfico, y luego disminuir la población hasta alcanzar un nivel que nos permita vivir a todos decentemente y, a la vez, que garantice la renovación de los recursos naturales al mismo ritmo de su consumo.

Leer…

Camino

UN ROSTRO EN EL CAMINO

Por José Pérez Reyes*

Llanuras y rutas.

Cielo sin nubes.

Pocos vehículos en la carretera. La calurosa andanada de los días de enero menguaba el tránsito de la siesta.

Mucho verde a los costados y gris al frente.

Arriba, un tono celeste.

Era un día hilvanado por la aguja del tedio.

Ninguna cosa parecía quebrar esa monótona placidez de la nada.

Leer…

Fiesta negra

LA FIESTA NEGRA —Tercera y última entrega—

Por Rafael F. Narváez*

Click aquí para leer: LA FIESTA NEGRA —Primera entrega—

Click aquí para leer: LA FIESTA NEGRA —Segunda entrega—

8: 45 de la mañana. Estoy cansado, sin haber dormido por mas o menos 20 horas. La cafeína me está abandonando rápidamente. Regreso al túnel del segundo piso. Atravesarlo, con la procesión de musculosos, toma mas o menos 15 minutos. Muchos están solos, reclinados contra las paredes del túnel, creando esos ya familiares «chiaroscuros», un cruce entre Rembrandt y la pornografía gay. «Six packs» por todas partes; tremendas panzas por aquí y por allá; muchos pantalones abajo, penes afuera, erectos, flácidos. Algunos tipos son sumamente solicitados, con caseritos pugnando por su atención. A otros nadie los mira. Algunos parecen exultantes, otros están serios, y otros tienen los ojos desenfocados y parecen decaídos y tristones.

Leer…

Semos Malos

SEMOS MALOS en el país más violento de la faz de la tierra.

Por Nelson López Rojas*

«Amo a la Humanidad, lo que me revienta es la gente».
(Susanita, la amiga de Mafalda).

Todos se mueren en El Salvador, o soy de los que matan o de los que mueren, pero de algún lado tengo que estar. Las heridas que tengo siguen buscando cura y no se encuentra en esta aldea. Mi drama es el drama de millones de cuscatlecos desde la creación de nuestro país, sin mitos, sin leyendas, pues la veracidad es algo que nos hace falta. San Salarrué nos lo dijo hace 80 años y lo repito en estas líneas: semos malos, incluyéndome–nos–todos.

Leer…

Calle

POR EL CENTRO DE LA CALLE

Por Marcel Hofstetter Gascón*

El país ha venido palpando una creciente polarización política alrededor de los diálogos de paz en La Habana. De un lado se encuentra el gobierno en cabeza de Juan Manuel Santos, quien ha tejido alrededor del proceso de paz una audaz filigrana, que le ha permitido avanzar más allá de sus antecesores. Del otro lado, se encuentra el principal opositor, el ex presidente Álvaro Uribe Vélez, quien encarna la postura militarista, como única estrategia para enfrentar el conflicto. Alrededor de estas dos visiones contrarias, el país político enfila las baterías de cara a las elecciones del próximo año. El Presidente y sus opositores ya han jugado sus cartas, basados en lo que pueda suceder en La Habana. Los resultados de los diálogos pueden arrojar tres escenarios diferentes: un ágil acuerdo de paz que permita poner fin al conflicto antes de los procesos electorales de 2014, unos avances significativos en la mesa de negociación sin lograr un acuerdo total y el fracaso de la iniciativa.

Leer…

Matria

POR UNA MATRIA

Por Dinorah Cortés Vélez*

«El brío del texto…sería su voluntad de goce…»
(Roland Barthes, El placer del texto)

«La novelabingo», la única novela que Manuel Ramos Otero (1948-1990) escribió, fue originalmente publicada en 1976, y olvidada por 35 años, hasta el año 2011 en que el Instituto de Cultura Puertorriqueña la reedita [1]. En este texto lúdico, Ramos Otero forja un bingomito matriarcal que le permite hacer no patria sino matria y nada menos que «con las plumas», frase ingeniosa del propio Ramos Otero en la siguiente conversación con Ronald Méndez–Clark:

Leer…

Tarantino

TARANTINO, UN CINEASTA DE VIDEOTIENDA

Por Jerónimo Rivera Betáncur*

Tarantino es un autor de culto y un cineasta de videotienda. Es común que hoy en día, sobre todo entre las nuevas generaciones, uno de los pocos autores de la industria que aparece con nombre y apellido en las preferencias de los espectadores sea Quentin Tarantino. Su estilo es poco ortodoxo y su cinefilia (formada en videotiendas y cines de barrio), se hace presente en todas las películas como una especie de remix que le ha ayudado a conseguir su estilo particular, el de un maestro del collage.

Leer…

Me siguen

¿ME SIGUEN O ME PERSIGUEN?

Por Elbacé Restrepo*

No es que me sienta precisamente el espécimen del paleolítico que nunca se extinguió. No. Debo decir que no soy ni me siento vieja y, aunque estoy a años de pertenecer a la generación que llegó con el chip de la tecnología incorporado, me defiendo con decoro y dignidad ante un computador, un Smartphone o el iPad.

Leer…

Sombra gris

LA SOMBRA GRIS

Por Carlos Schatz*

Después de un baño de casi dos horas, inusual hasta en el horario; Diana se peinaba despacio, prolija.

Enfrentada al espejo de su habitación era la misma desde hacía cuarenta y siete años. El mismo nombre, las mismas manos, la misma mirada, la misma piel; las mismas ganas de huir. Aunque ella juraba soportar el peso de dos siglos en su cuerpo para justificar sus desganos, el silencio de esa mañana para con Marco tenía otro motivo; sabía que estaba frente a una de las estocadas más expuestas que ofrecen las tentaciones malditas de la vida. Diana iba a ser infiel por primera vez. Lo había decidido así, a un golpe; antes que la duda siguiera percudiéndola en algún otro supermercado de sus calles, en otra reunión familiar de reforzada resistencia, en otra cena invadida de bostezos o en la misma tabla de planchar alisando las mismas camisas dormidas del extraño de siempre.

Leer…

Mexico estadounidenses
Cannery in San Fernando (1940).  Las “canerias,” fabricas para el enlate de productos agrícolas californianos así como el jitomate.  Mis padres incluyendo mi madre y mis hermanas, trabajaron al lado de las personas que aparecen en esta foto/Nota del autor.

NOS VOLVIMOS MEXICANOS ESTADOUNIDENSES —Primera entrega—

Por Carlos B. Gil*
Traducción de Camilo Ramírez**

CÓMO SOBREVIVIÓ NUESTRA FAMILIA INMIGRANTE PARA PERSEGUIR EL SUEÑO AMERICANO.

Ésta es una historia sobre mis ancestros que abandonaron México para perseguir una mejor vida en los Estados Unidos en los primeros años de la década de 1920. Igual que miles de otros inmigrantes mexicanos de esos años, ellos provenían de orígenes sencillos y laboriosos, principalmente eran peones y trabajadores de granjas, si no pueblerinos, y eran naturales de las provincias situadas al norte de Ciudad de México —la familia de mi madre de Jalisco y mi padre de Michoacán—. Tras cruzar la frontera estadounidense y encaminarse hacia California, pasaron cuatro años buscando trabajo en Fresno, Bakersfield y Los Ángeles, y, mientras tanto, entre sus mudanzas, la Gran Depresión se hacía sentir gradualmente.

Leer…

Otro

DIRÁN QUE VIENE DEL OTRO LADO DEL OCÉANO

Por Ana Ramírez González*

Un hombre joven se quita la ropa a unos veinte pasos de donde estoy sentada. Un libro sobre mis piernas. Las cinco de la tarde, un sol perezoso, el mar tan quieto como el cielo.

Leer…

Oscuro

ESE OSCURO OBJETO DE DESEO: FRAGMENTOS SOBRE LA CÁMARA LÚCIDA

Por Paola Cortés-Rocca*

I.

El protagonista de La Invención de Morel, la novela que Adolfo Bioy Casares, publicada en 1940, es alguien que no tiene nombre ni historia. De él sólo se sabe que es un extranjero y alguien que está fuera de la ley. Es literalmente el espectador de un película que transcurre frente a sus ojos, alguien destinado a contemplar una escena en la cual está excluido. Y sin embargo no puede resistirse a las imágenes. Algo convoca su mirada, algo provoca cierto deseo que para Bioy Casares es, al mismo tiempo un deseo amoroso y visual. Como el protagonista de la Invención de Morel, Roland Barthes se encuentra también frente y fuera de una imagen, en el momento en que escribe La cámara lúcida, tal vez su verdadero tratado sobre el discurso amoroso.

Leer…

Tizon

MEMORIA DE LA PUNA, DE HÉCTOR TIZÓN

Por Pablo Cingolani*

Lo decía él mismo, al principio y al final de su obra: que sería la última, que no escribiría más, y así fue: con su fallecimiento este año, Memorial de la Puna, se convirtió en el testamento literario y existencial de Héctor Tizón.

Son sólo 99 páginas pero es un libro enorme y fundamental y lo escrito alcanza tal vuelo poético, tal intensidad expresiva, se eleva tan por encima de la mediocridad que nos circunda y amenaza enterrarnos, que uno no puede sino conmoverse en extremo, uniendo vida y obra en un solo rayo de justicia, y diciendo lo que, en estos casos, es lo único que podemos y debemos decir: gracias.

Leer…

Selena

PÉRDIDA, ABANDONO Y SPOTLIGHT: LA CREACIÓN DE LA IDENTIDAD EN SIRENA SELENA

Por Miguel Rojo Polo*

En el libro Sirena Selena vestida de pena (2002) Mayra Santos–Febres nos descubre un mundo escondido en la sociedad puertorriqueña y en la ciudad de Santo Domingo. En la obra nos encontramos a una protagonista, Selena, una travesti puertorriqueña en busca de una identidad. Todas las aventuras y desventuras que sufre desde su infancia se nos van descubriendo poco a poco, en diferentes capítulos, dándonos piezas del puzle que construye este personaje a su alrededor; puzle porque esa pena de la que se disfraza al cantar, y que consigue influenciar a todas las personas, no es más que los sucesos ocurridos en su vida para llevarla a donde se encuentra. Son estos sucesos los que construyen en la novela la creación de la identidad. Con este artículo vamos a ver cómo las relaciones que la Sirena establece desde su infancia, le van dando modelos a seguir para construir su propia identidad, con la cual sobrevivir.

Leer…

Rama roja

CANTO DE LA RAMA ROJA

Por Fernando Rendón*

Hablaré con una voz de greda de un sueño antiguo casi olvidado.

Pero no hablaré para renegar del plural de una prehistoria de espesas frondas, cuando no existía nada tuyo o mío sino nuestro.

No callará por mi boca la tierra negra su memoria. La piedra evocará siempre la angustiante pesadilla humana, que no ha conseguido aún extirpar la dulce evocación del origen.

Leer…

Palma africana

LOS JAGUARES BAJO LA PALMA AFRICANA

Por Catalina Cabrales Durán*

Cuando Florentino Claes siembra la primera palma africana en Colombia en el año 1932 en Palmira, Valle, y Moris Gutt instala a finales de los 50 en San Alberto, Cesar, la primera plantación industrial de palma para abastecer su empresa Grasco de aceites, nunca imaginaron que la introducción de esta especie que venía de muy lejos —y que después se llamaría palma aceitera, para no estigmatizar un país—; traería muerte, desolación, conflicto por el uso de la tierra, cambio en los hábitos culturales y agrícolas —afectación de la economía campesina—; destrucción de bosques, amenaza a los recursos genéticos para la alimentación y la agricultura; pérdida de la agrobiodiversidad, deterioro de suelos, sobredemanda de agua, uniformidad en el paisaje, concentración en la tenencia de tierras, por tanto, desplazamientos de campesinos y de comunidades étnicas, aumento del precio de la tierra; y por supuesto, desplazamiento de la fauna y la flora.

Leer…

Capitan de barco

CAPITÁN DE BARCO CONTRA VIENTO Y MAREA

Por Diego S. Lombardi*

La primera vez que mamá me llevó a la escuela llegamos tan sólo hasta la puerta. Yo, que estaba de estreno con el guardapolvo y la mochila de las Tortugas Ninjas no supe entender bien qué era lo que sucedía; alcanzó con que uno de los chicos me señalara tirando con la otra mano de la falda de su mamá para que volviéramos directamente a casa.

Leer…

Madres de mayo

CANTOS DE AMOR, VIDA Y LIBERTAD EN EL ESPACIO DEL DOLOR – La larga espera de las madres de la Plaza de Mayo

Pedro Porbén*

«Los desaparecidos llegan
te piden memoria
café con leche
pan con mantequilla una canción»

(Marjorie Agosin. Los desaparecidos).

COEPTUS, US

¿Por qué «palabra poética», por qué conectada al testimonio, por qué el dolor se puede especializar como graffiti sensorial?

Leer…

Destierro

DESTIERRO DEL DÍA

Por Javier Naranjo Moreno*

«Un mono

El pequeño mono me mira…
¡quisiera decirme
algo que se le olvida!»

(José Juan Tablada).

Entro a la nata espesa del día, levanto la cabeza y miro con otra atención. La luna desde temprano está puesta en el cielo, la cabeza se eleva desde todo eso y siento que de la grisalla se alza una vida más espléndida, que afuera hay una vida más alta.

Leer…

Cama doble

LA CAMA DOBLE

Por Ricardo Gómez*

Llegamos a Juigalpa muy cansados, después de horas en un colectivo rural desde la frontera Sur, más horas sobre la plataforma trasera de un camión sin estacas, y lo que pareció un siglo entre las cajas de cuajadas de una camioneta de reparto. La señora del hotelito nos miró con algo de disgusto y nos ofreció una habitación debajo de la escalera, como la que haría famosa Harry Potter años después, sin ventana ni silla, apenas con espacio para un catre doble y una lámpara sobre una mesita. Mi mamá estaba cansada y dijo que estaba bien, que nos quedáramos allí. Pero yo salí a buscar a la señora del hotelito a preguntar si no tendría algo más cómodo, o por lo menos una toalla y un jabón para que mi mamá se bañara antes de acostarse.

Leer…

Portador

DEL PORTADOR DE IMÁGENES

Por Marco Antonio Mejía Torres*

«Imagen o idea son siempre ese ahí pero dónde, ese ahí pero cómo.»
(Julio Cortázar).

I

Desconozco cuándo aconteció en mi experiencia el encuentro fundamental con la imagen. Parto de una convicción actual, de una fe si así se quiere, de una fidelidad a la imagen poética. Toda esta animosidad hace referencia a su poder, a su fuerza, a su inquietante fijación en nuestros sentidos. Hay por cierto una complicidad personal, una soledad entre quien experimenta la imagen y la asume en sí como un hecho vital de su existencia. Quizás ahí se dio aquella revelación cuando descubrí la existencia de la música. Sus notas me llegaron en un domingo de infancia, un sonido que nunca había oído penetraba vivamente por el solar, sus notas me envolvieron, me hechizaron y salí de casa a buscar su origen sin saber cómo, ni dónde. Fueron algunas cuadras y llegué ahí a la gruta, en donde una banda musical alegraba la mañana. En un sentido literal «vi» la música. Pero descubrí algo más: en realidad, me había perdido y no sabía cómo volver. Supe sí, con suprema angustia, lo que era la lejanía y el extravío.

Leer…

Noche

LA NOCHE PRESENTIDA Y OTROS POEMAS

Por Alejandro Cortés González*

El reptil sabe que su estela mesozoica
tiene la edad del poema;
el poema no olvida que por la osamenta de sus letras
crece la agrura del reptil.

Leer…

Soldado

LAS ESPOSAS DE LOS SOLDADOS RASOS Y OTROS POEMAS

Por Oscar D. Sarmiento*

Las esposas de los soldados rasos
van a parirles hijos a las otras.
Los van a alimentar
con sangre de días olvidados
y leche agria
de misiles de guerra.

Leer…

Bajo tierra

ALGUNOS METROS BAJO TIERRA

Por Pedro Madrid Urrea*

A tres guitarras y dos voces, empezaba el espectáculo. Una de las guitarras, de esas de prendería, era la encargada de brindar los rasgueos más estridentes, con ritmo y acordes bien marcados; las otras dos, de mejor familia, se encargaban de los detalles y de la filigrana musical. Todo esto ocurría en un espacio siempre abierto, nocturno, un poco frío y adornado con botellas de cerveza vacías y colillas de cigarrillo a medio fumar. Allí, en ese preciso lugar, no solo transitaban las guitarras anónimas y las caras familiares, sino que en dicho lugar muchos pudimos conocernos a nosotros mismos y conocer a otras almas compatibles a las nuestras.

Leer…

Valentina

DOS POEMAS PARA VALENTINA

Por Carlos Mario Aguirre Morales*

1

No serás tú
la que venga por fin a curarme
No hay cura para lo que tengo
La entrada al Paraíso
se me perdió cuando fui a un concierto
Cuando entendí que el placer del pecado
no merece la venia de la culpa

Leer…

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.