Sociedad Cronopio

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Voluntad 

CON VOLUNTAD SOMOS CAPACES

Por David F. Salas Muñoz*

«La fuerza no proviene de la
capacidad física sino
de la voluntad indomable»
(Mahatma Gandhi)

¿Cuál es la diferencia entre la voluntad movida por la pasión y el trabajo motivado por la recompensa económica? Es una de las preguntas que me he hecho por mucho tiempo y siempre está relacionada con otra pregunta adicional: ¿por qué es común esa idea de que el trabajo debe estar a un lado y la diversión en otro?
Creo que de alguna manera intentar contestar estas preguntas ayuda a encaminar la vida individual y a hacer las labores diarias con algún sentido, o por lo menos ayudan a ser consciente de qué estoy haciendo con respecto a mi trabajo, qué estoy haciendo con respecto a mi voluntad.

Hoy me dedico a varias labores en mi vida; sin embargo quiero contarles algo muy especial de lo que hago: trabajo como voluntario para una organización que se llama Somos CaPAZes, la cual a través de juegos, cuentos, canciones y otras actividades lúdicas, educa para la paz a niños, niñas y jóvenes. Suena muy chévere, ¿no? Y lo es. Vivir este proceso de educación y generar espacios de reflexión en las aulas para hacer mejor lo que hacemos a diario, es algo que no lo cambio por nada. Pero no voy a hablar mucho de mí, voy a contarles un poco de qué convierte al voluntariado en una oportunidad para trabajar por algo que vale la pena, una alternativa para ir más allá del deber como individuo.

Por definición lo que mueve a un voluntario es una motivación por lograr algo, por obtener un resultado que no necesariamente es cuantificable en términos económicos. La recompensa de un voluntario no consiste en una remuneración monetaria, su responsabilidad le lleva a valorar la satisfacción de una labor, en general, sin esperar nada a cambio más que la oportunidad de realizar esa tarea.

La gran mayoría de los voluntarios se identifican por una cualidad que mueve montañas: la voluntad. Ésta no es más que la pasión por asumir retos, pasión que combina un don de servicio a la comunidad y una gran disciplina. Por ejemplo, en Somos CaPAZes, un considerable grupo de voluntarios tiene que levantarse a las 4:30 a.m. cada semana, tomar dos o tres buses, hacer un recorrido de dos horas, caminar 15 minutos en subida y llegar hasta una de las instituciones educativas en las que ofrecemos nuestros talleres. El reto no para allí, una vez están en la institución a las 7 a.m., llegan a un salón de clases, comparten con estudiantes las actividades lúdicas y las reflexiones asociadas a cada actividad durante una hora y media. Y es en el aula cuando se presenta el desafío más significativo, ya sea en preescolar, quinto u octavo, los grados en los que se implementan los programas de Somos CaPAZes, siempre habrá que utilizar una gran dosis de creatividad y una magnífica capacidad de persuasión con el fin de garantizar la participación de estudiantes en nuestros programas.

Lo importante es que este esfuerzo voluntario se asemeja a jugar un buen partido de fútbol, donde el reto está en ponerse la camiseta y divertirse mientras hay que sudarla. La diversión siempre está presente en cada actividad que realizamos, es parte fundamental de Somos CaPAZes. Tanto en reuniones de voluntarios, en presentaciones públicas, como en los salones de clase, buscamos que lo que hagamos sea entretenido para todos, hasta para los que estamos «detrás de cámaras».

Además durante nuestras acciones voluntarias tenemos la oportunidad de encontramos con amigos con intereses en común, fortalecer relaciones con gente que nunca nos imaginamos que existía y conocer CaPAZidades que antes no teníamos. Por ejemplo realizando actividades con organizaciones aliadas como la Red Colombiana de Jóvenes (RECOJO) y Yo Creo en Colombia, hemos fortalecido muchas habilidades para el trabajo en equipo, cooperando juntos para lograr objetivos en común.

Lo anterior se complementa con la satisfacción de ver importantes resultados. Evaluaciones de nuestros programas muestran que hay efectos positivos en cuanto a la reducción de comportamientos violentos. La gráfica a continuación muestra la opinión de un observador (externo) de las agresiones vistas en clase a medida que pasaban nuestras sesiones en grado quinto. Podemos ver que los comportamientos como golpes y gritos fueron disminuyendo paulatinamente y por tanto fue mejorando el ambiente escolar.

Figura: número de agresiones físicas observadas
en el grupo 5-01, I. E. San José Sur Oriental, San Cristóbal Sur, Bogotá D.C., Colombia.
Fuente: Tesis de Maestría Marcela Jaramillo, Facultad de Ingeniería, Universidad de los Andes (2009).

Nuestro impacto no solo se mide en calidad, también se evidencia por la diversidad de beneficiarios de los diferentes programas para la paz que hemos brindado: van de niños pequeñitos de preescolar hasta líderes comunitarios de barrios de Bogotá como Bosa y Kennedy. Desde enero de 2007, los voluntarios de Somos CaPAZes han trabajado con más de 3.000 niños, niñas y jóvenes, y más de 300 adultos. Y seguimos creciendo. Me siento muy orgulloso por ser parte de este equipo tan excepcional.

Esta reflexión es una invitación para que movamos el mundo con la voluntad. Que muy pronto todos podamos decir con alegría que nos estamos esforzando y divirtiendo mientras trabajamos, sentir que cooperamos para ir más allá del deber y, sobre todo, vivir con la satisfacción de que lo que hacemos se materializa en resultados que nos inspiran y mueven. Creo firmemente que es con la voluntad que los colombianos (y latinoamericanos en general) nos demostraremos y mostraremos al mundo que ¡somos CaPAZes!


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* David F. Salas tiene 26 años. Es Magister en Ingeniería Industrial de la Universidad de los Andes. Fundador y actual vicepresidente de la Asociación Somos CaPAZes (www.somoscapazes.org). Trabaja como investigador de teorías evolutivas para abordar sistemas sociales en la Facultad de Ingeniería de la Universidad de los Andes. Es además asesor de gerencia en temas de innovación, mercadeo y tecnología para Agencia Seguros Beta. Miembro de las juntas directivas de Taxis Verdes S.A, Seguros Beta y Somos CaPAZes. Ha sido ponente en el seminario Pensando Educación del Centro de Investigación y Formación en Educación de la Universidad de los Andes (2010). Cuenta con publicaciones internacionales sobre el tema de educación, presentando en la 12th International Conference on Philosophy of Education y en la 21st Annual Meeting of the Human Behavior and Evolution Society. Organización Somos CaPAZes.

2 COMENTARIOS

  1. David que buen artículo! La experiencia de SomosCaPAZes es un gran ejemplo del poder transformador de la juventud… el secreto es canalizar el talento y energías de los jóvenes en proyectos de impacto como éste. De esta manera es posible construir un nuevo país… ¡Felicitaciones a todo el equipo de SomosCaPAZes!

  2. Que buen articulo tienes toda la razón no hay nada que no se logre cuando se hace con voluntad y ganas. Creo que el ser voluntario es altamente positivo pues los niñ@s que educas con las Capacitaciones reciben tu ejemplo y lo replican lo que se traduce en sembrar varias semillas para que se germine un sociedad mas consciente de sus actos, mas pacifica y mas pro activa con su bienestar en general.

    Te felicito por tan buen articulo, que la verdad hace que los que somos voluntarios nos sintamos mas orgullosos de esta actividad que hemos escogido

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